E
n los últimos 6 años, Venezuela ha estado afectada por controles de divisas para la
importación de materias primas necesarias en la fabricación y la confección de telas. Esto, aunado
a la crisis textil presente que vive el Hemisferio Occidental por la escasez de hilos de algodón y
la falta de controles en las importaciones del Lejano Oriente, entre otros motivos, han hecho que
textileros locales busquen nuevas oportunidades para desarrollar y mercadear nuevos productos.
Este es el caso de Liberttex, S.A., localizada en la Zona Industrial de La Victoria, Estado
Aragua, Venezuela, donde por más de 31 años, la familia Jamale fabrica hamacas, lanillas,
cubrecamas, telas de coletos y otros tipos de telas, usando hilos gruesos con maquinaria
convencional y semidelgados.
El proceso productivo de esta planta es sencillo. Los hilos, luego de ser urdidos por
máquinas Benninger y Schlafhorst, pasan al departamento de tejeduría, utilizando telares Somet
Master y Sulzer PU y TW11, modernizados para adaptarse a cumplir con lo requerido por los clientes
finales.
La tela es posteriormente cortada, coloreada en máquina de teñir Lafer, y cosida en máquinas
ACES. Finalmente, la tela es lavada usando equipos Sclavos, y la confección se lleva a cabo usando
máquinas de coser Noel, Singer y Brother.
Es obvio, por lo aquí descrito, que no estamos tratando con una planta de alto grado de
modernización. Sin embargo, para el tipo de productos que manufactura, así como para lograr el
continuo desempeño de la planta con las restricciones ya indicadas, esta fábrica puede continuar
trabajando así por algunos años más, ofreciendo como resultado, productos de alta calidad a costos
razonables.
Temas tropicales
Los dibujos impresos en las telas y prendas, sobre todo en las hamacas, radican
principalmente en temas venezolanistas, tales como animales y plantas tropicales, sitios turísticos
como la Isla de Margarita y bosques de la Selva Amazónica Venezolana, colindando con Brasil.
Las telas y prendas son compradas por minoristas locales que confeccionan y venden las telas
y prendas, en sitios turísticos, tanto venezolanos, como en sucursales extranjeras.
Tamaño de la planta
La planta física de Liberttex tiene un área de 2.000 metros cuadrados, en una extensión de
terreno de no más de 3.000 metros cuadrados, con una capacidad instalada originalmente para
producir 120 metros mensuales de tela.
El mercado local actualmente no justifica económicamente el uso total de la capacidad
instalada, pero en caso de mayor demanda, estaría en capacidad de duplicar la producción.
Tratándose de una fábrica artesanal, aunque con posibilidades de versatilizar su producción
hacia otros rubros, Liberttex cuenta con personal capacitado para dar apoyo en tendido, corte,
confección, lavandería, acabado y calidad, capaz de trasladarse a donde sea requerido.
Podemos aseverar que Liberttex es una empresa que, a pesar de su perfil solamente local, se
proyecta con fortaleza, hacia un área diferenciada dentro de la manufactura textil, como
alternativa para vencer las dificultades que afectan este sector industrial en Venezuela, y el
Continente Americano.
Vista del salón de telares, elaborando telas de diversos colores en la fábrica Liberttex.
Salón de confecciones de telas.
Máquina Schlafhorst para el urdido de hilados.
Salón de empacado de productos.
Mayo-Junio de 2011
