Sin duda, la industria textil y de la confección representa uno de los sectores que contribuyen a la contaminación del medio ambiente debido a su extenso uso de recursos naturales y energéticos, con una producción anual estimada en más de $1.400 billones de dólares, dando trabajo a más de 300 millones de personas en todo el mundo.
Según estudios realizados por la UNCTAD, una agencia de las Naciones Unidas para el desarrollo económico, una cadena más eficiente de suministro en la industria textil podría ayuda a reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 33%, y reduciendo al mismo tiempo la contaminación causados por los procesos de manufactura textil.
También se están realizando esfuerzos en muchos países para utilizar mejor la ropa usada, con programas de reciclado de los textiles que logran el uso renovado de materias primas tales como el algodón y el lino.
Debido a esto, la Unión Europea ha propuesto una nueva iniciativa para cambiar las normas del IVA (Impuesto de Valor Agregado) para el reciclado de las prendas usadas, ya que el costo del reciclado es más económico si se realiza en los países originales en lugar de la importación de los mismos.
Por último, para alcanzar la meta de una industria textil y de la confección más rentable y sostenible es de gran importancia el uso de nuevas tecnologías, con digitales en las máquinas que ayudan a reducir los costos de producción al mismo tiempo que aumentan la calidad de los productos.
Septiembre-Octubre de 2021