El parque industrial CODEVI, con sede en Haití, ha pasado de ser solo una visión para convertirse en el mayor empleador de la región norte del país.
Mike Todaro
Fernando Capellan tuvo una visión, que podía ser capaz de construir un parque industrial único en Haití. Su visión se hizo realidad y el parque industrial de Compagnie de Développement Industriel S.A. (CODEVI) en Ouanaminthe, Haití, en la frontera de República Dominicana, ahora incluye 17 edificios y otros más en construcción.
CODEVI es propiedad de Capellan´s Grupo M, un fabricante privado de prendas de vestir fundado en 1986. La empresa con sede en República Dominicana e integrada verticalmente, fabrica productos de punto y tejidos para el mercado estadounidense.
Capellan abrió el parque en agosto de 2003 y desde entonces continúa siendo el más grande proyecto socioeconómico de la zona y el mayor empleador de la región norte del país. Pero no fue sencillo para Capellan hacer realidad su visión.
Haití y República Dominicana son países y culturas diferentes con casi nula historia de colaboración industrial. Cada una de estas naciones tiene una población de aproximadamente 10 millones de personas. Haití es uno de los países con más bajo costo del mundo.
La industria se sumó a esa ventaja competitiva con leyes comerciales y Tratados de Libre Comercio como el Haiti Economic Lift Program (HELP) Act y el Haitian Hemispheric Opportunity a través de Partnership Encouragement (HOPE) Act, que concedió el uso de telas extranjeras y el acceso libre de aranceles a los Estados Unidos, Europa y Canadá, y por supuesto a sus cercanías. Puerto Príncipe se convirtió entonces en el epicentro de las fábricas en Haití hasta CODEVI.
El proyecto de construcción se llevó a cabo con los problemas típicos que ocurren al iniciar un negocio en un país extranjero, incluyendo el marco legal, la selección del lugar para la instalación, el financiamiento, la infraestructura, la construcción, la capacitación y mucho más. A pesar de todo eso, lo que impulsó el proyecto fue la visión inquebrantable de Capellan – un parque que consolidó el costo y la competitividad de la mano de obra haitiana, ubicado en la frontera, que cumplía con la ley haitiana en combinación con la experiencia dominicana, y apoyado por moderna infraestructura. Un parque desde el cual se podía exportar, saliendo de un puerto dominicano más moderno y cercano, como Manzanillo, México que está a sólo 20 minutos, ayudando con ello a reducir aún más los plazos de entrega y la logística.
CODEVI en la actualidad
CODEVI inició operaciones con 4 millones de pies cuadrados de terreno y para 2008, ya contaba con cinco edificios y 3.000 empleados. A partir de 2017, el parque ha crecido a 17 edificios y emplea a 10.000 personas.
Las marcas que se fabrican en el parque incluyen: Levi’s, GAP Inc., Under Armour, Hanes, Fruit of the Loom, Carhartt y Jockey, entre otras; mientras que los dueños de las fábricas ubicadas en el parque son jugadores globales con sede en los Estados Unidos, Sri Lanka y China, por nombrar algunos países. Esas compañías no invierten a la ligera. Se comprometen durante años construyendo una fábrica desde cero, a partir de lo básico y para el largo plazo. Esa es la visión que queremos comunicar a través de este reporte.
“El punto de partida del parque fue alto”, dijo Joseph Blumberg, socio y vicepresidente senior de marketing y nuevos negocios de Grupo M. “Aplicamos la fórmula ya probada de Grupo M, que consiste en que el cumplimiento, está en el ADN de todo lo que hacemos”. Cada detalle de energía, capacitación, responsabilidad social, medio ambiente, salud básica, servicio de comida, educación infantil, transporte, seguridad y responsabilidad financiera se consideró 10.000 veces – para cada empleado.
Cada empleado, considerado para ser contratado, debe ser capaz de leer, escribir y realizar matemáticas básicas. En un país con más de 50 por ciento de desempleo – con frecuencia mucho mayor – esos puestos de trabajo son competitivos. Al ser contratada, cada persona recibe tres meses de entrenamiento, con la mitad del pago y todos los beneficios. Y, cuando las personas son contratadas, pueden exceder el 40 por ciento del salario mínimo con incentivos. Cuando el suelo se fragmentó en el parque en 2003, el área era extremadamente básica, precaria, sin economía formal. Hoy en día, la comunidad es atendida por la estación de radio y televisión de CODEVI que transmite entretenimiento, educa y alerta a la comunidad sobre brotes de enfermedades. Además, en 2003 ninguno de los empleados ahorró dinero. Hoy, más del 90 por ciento de los 10.000 empleados de CODEVI participan en el Club de Ahorros y Préstamos del parque.
Caminar a través de la ciudad de Ouanaminthe con una insignia CODEVI es un signo de estatus, sin embargo, Capellan no toma todo el crédito por el éxito de la empresa. “Nosotros creemos que este éxito se debe al hecho de que los 10.000 empleados se identifican con el trabajo que realizan”, comentó. “Todo el mundo tiene la oportunidad de recibir capacitación y mejorar la calidad de vida de su familia”. “Seleccionamos cuidadosamente a las empresas que invierten aquí”, dijo Blumberg. Sin embargo, está claro que las empresas que invierten en el parque ven el potencial. CODEVI es el único proyecto dominicano en Haití, e ilustra el valor de la sinergia que cada nación y su gente pueden tener – trabajadores motivados en un centro de producción estructurado y altamente eficiente.
Por último, no se equivoquen, no se trata sólo de dominicanos y haitianos. Puede haber más de una docena de nacionalidades que trabajan en múltiples niveles de la administración en todo el parque. Como resultado, hay un campus de apartamentos ubicado en el parque e incluso un hotel para apoyar el tráfico de personas. En cuanto a las dimensiones del parque, puede pronto llegar a crecer de su tamaño actual de 4 millones de pies cuadrados a casi 10 millones de pies cuadrados en el futuro. La expansión incluirá un MicroPark, justo a través del puente construido para conectar el parque con la ciudad. Será un centro de 600.000 pies cuadrados con una escuela vocacional, una clínica totalmente equipada, patio para comer, viviendas e instalaciones recreativas. Todo esto es parte de un escenario más amplio que está siendo desarrollado por el Consejo Binacional Económico Quisqueya (CEBQ por sus siglas en inglés). Con sectores privados de ambos países trabajando lado a lado en una serie de proyectos a lo largo de toda la frontera para impactar las economías y el progreso tanto de Haití como de República Dominicana.
¿Visión? Las visiones son imágenes que encontramos al final de los álbumes de fotos o imágenes que se pegan en la pared. Como ellos dicen, es un sueño hasta que se pone en papel, entonces se convierte en un plan. CODEVI se escribió y Grupo M nunca cambió ni una palabra del plan, porque el plan era “hacerlo así desde el principio”.
Nota del editor: Mike Todaro es director ejecutivo de Americas Apparel Producer´s Network (AAPN por sus siglas en inglés), empresa con sede en Altanta, Estados Undidos. AAPN es una empresa del sector privado, sin fines de lucro, con miembros solo de la red de negocios de la industria de la confección que integra a 600 propietarios de empresas y altos ejecutivos de 200 compañías a través de la cadena de suministro de prendas de vestir. Todaro agradece a Capellan y Blumberg por la visita, y por la adhesión a largo plazo del Grupo M y el apoyo de AAPN.
Septiembre-Octubre de 2017
