
Informe especial de TP
A medida que crece el uso de materiales alternativos y sostenibles para aplicaciones textiles, también aumenta la lista de insumos interesantes.
Inspirada inicialmente en proteínas de calamar y financiada por BioMADE, la empresa Tandem Repeat Technologies Inc., con sede en Filadelfia y dedicada a los textiles inteligentes con impacto climático positivo, ha creado Procell, un hilo que comienza su vida a partir de levadura agotada de bajo costo. Esta fibra basada en proteínas imita las propiedades de la lana, sin las preocupaciones éticas relacionadas con el maltrato animal, la contaminación del agua y la degradación del suelo.
Los “dientes de anillo” del calamar son un complejo de proteínas auto-ensamblables presente en los tentáculos del animal. “Inicialmente extrajimos los genes del calamar y los expresamos heterólogamente en levadura mediante fermentación de precisión”, explicó el Dr. Melik Demirel, cofundador de Tandem Repeat y profesor titular de la Cátedra Huck en Materiales Biomiméticos en Penn State University. “Sin embargo, luego descubrimos que la fermentación de biomasa de levadura es más sencilla y rentable para producir fibras proteicas de uso comercial”.
Este enfoque de biomanufactura de proteínas toma células vivas de levadura y las transforma en productos valiosos — como fibras textiles o no tejidos — mediante un proceso microbiano de fermentación patentado. La temperatura, el pH, la disponibilidad de nutrientes y la selección de la cepa microbiana se controlan cuidadosamente para maximizar los rendimientos, concentraciones y productividad, garantizando que el proceso sea sostenible y económicamente viable.
Según Tandem Repeat, la huella de emisiones de gases de efecto invernadero de Procell es de 5,39 kilogramos (kg) de dióxido de carbono por kg, el uso de agua es de 0,52 metros cúbicos por kg y el uso de tierra es de 12,4 puntos por kg, y estas son cifras menores que las de otras fibras naturales como el algodón, el lyocell y la lana.
Procesamiento de Procell
Las fibras Procell se producen utilizando procesos tradicionales de hilatura húmeda empleados en la fabricación de fibras celulósicas artificiales. A partir de allí, las fibras cortas se hilan para formar hilos, y Procell puede mezclarse con otros tipos de fibras durante la hilatura. “Hemos combinado fibras naturales como algodón y lana, así como sintéticas como poliéster, para producir varias prendas”, señaló el Dr. Demirel. Las primeras prendas incluían un vestido en mezcla de algodón y artículos de denim, seguidos más tarde por suéteres que pueden comprarse bajo la marca propia de la empresa, Sonachic. “Procell puede adaptarse a diversas construcciones, y hemos desarrollado tejidos tanto de punto como planos”, indicó el Dr. Demirel. Procell también se ha utilizado para fabricar telas no tejidas.
Según Tandem Repeat, la fibra es suave y se asemeja a una lana de lujo como el cashmere. La fibra proteica, 100% vegana y sostenible, es más resistente que la lana, pero ofrece calidez, ligereza y transpirabilidad iguales o superiores a la lana, y presenta una conductividad térmica similar. El objetivo de la empresa es producir Procell a un costo menor que el de la lana.
La investigación de Tandem recibió apoyo de BioMADE, un Instituto de Innovación en Manufactura con sede en Emeryville, California, patrocinado por el Departamento de Defensa de EE. UU., y miembro de la red Manufacturing USA®, dedicada a impulsar la colaboración público-privada para avanzar la manufactura a gran escala. “Con el apoyo de BioMADE, logramos alcanzar un mayor nivel de preparación tecnológica en nuestra industria, donde los avances de alta tecnología prosperan gracias al respaldo gubernamental mientras el financiamiento de capital de riesgo sigue siendo limitado”, señaló el Dr. Demirel.
Para más información, escriba a contact@tandemrepeat.com
Cuarta Edición de 2025