U
n sentido de estilo y calidad en la moda han sido siempre sinónimos con el principal
productor brasilero de textiles integrados, Santa Constancia, lo cual se remonta a los días en que
fue fundada por su matriarca, la señora Gabriella Pascolato, en 1948.
Sin contar con una tradición en textiles, pero con un gusto estilista por los tejidos, la
señora Pascolato fue persuadida a establecer un negocio en el país, poco después de su llegada
desde Italia, reconociendo que Brasil iba a cerrar pronto sus fronteras a las importaciones de
tejidos.
Estableciendóse inicialmente una operación de artesanías textiles, la compañía, con la ayuda
de un técnico textil italiano, comenzó a introducir poco después las últimas técnicas de jacquard
para satisfacer la demanda por tejidos de alta calidad.
Los clientes de Gabriella quedaron extremadamente satisfechos con los tejidos estilizados y
de alta calidad, de tal manera que, en un corto periodo de tiempo, la compañía se convirtió en un
especialista en la fabricación de tejidos para prendas de novia.
En cuestión de 10 años, Santa Constancia ya era una empresa textil de tamaño mediano,
operando una típica producción de estilo italiano, y contratando con otras empresas las operaciones
de teñido y acabado.
Sr. Alessandro Pascolato, presidente de la empresa brasileña
Tejidos de punto
En 1971, la compañía entró al mercado de los tejidos de punto, lo que la llevó eventualmente
a una operación más vertical, comenzando a producir sus propios tejidos teñidos y acabados en 1989.
En una operación completamente vertical, la empresa está transformndo ahora materias primas en
tejido acabado, utilizando técnicas de tejeduría de punto circular, tejeduría de punto por
urdimbre, y tejeduría plana. También es uno de los líderes en Sur América en la producción de
tejidos con elastano.
El actual presidente de la compañía, Alessandro Pascolato, cree que él ha formado parte de
la empresa “virtualmente desde su nacimiento”. A la edad de 11 años, cuando no tenía escuela los
sábados, ya estaba dedicado a realizar pequeñas tareas en el negocio familiar.
A los 18 años, ya estaba trabajando en tiempo completo durante el día y estudiando en la
Universidad por la noche. En la actualidad, en sus años 60, muestra el mismo entusiasmo de su
juventud, disfrutando del desafío de mantener un negocio exitoso.
Aunque la señora Pascolato todavía retiene un agudo sentido por los estilos, la moda ha
cambiado, pero su hija Constanza pudo continuar con la filosofía de la compañía de crear estilos de
moda y tejidos innovativos.
“Nosotros creemos intensamente que, para estar adelante de la competencia, necesitamos
saber que está pasando en las casas de moda europeas”, dijo Alesandro. “Creemos que es importante
que uno de nuestros estilistas viva en Europa; y este es un rol vital desempeñado por mi sobrina en
Florencia, Italia”.
Desde sus primeros días el enfoque de la firma ha sido en tejidos usados en prendas
estilizadas para damas, y en la actualidad, este sigue siendo uno de los principales mercados de la
empresa.
“Santa Constancia no trabaja con sedas o lanas puras, pero en su lugar trata de prudcir
tejidos de alta calidad usando tejidos hilados sintéticos tales como mezclas de poliamida y
viscosa”, agregó Alessandro. “En la actualidad, estamos lanzando al mercado una nueva gama de
tejidos con estampados excitante y estilizados, siempre a la delantera del mercado”.Tejidos
técnicos
Otro segmento del mercado son los tejidos técnicos para uso en ropa deportiva, y el cual,
“se enfoca en dos conceptos – las aspiraciones y regulaciones de los cuerpos deportivos para
mejorar el rendimiento y el efecto comprensivo en los músculos”.
La compañía es conocida por su fuerte asociación con dos empresas en este campo: la empresa
estadounidense Ivista y la firma francesa Rhodia, las cuales hacen un uso intensivo de elastano de
Lycra®, así como de poliamida y otras fibras específicas.
Investigaciones constantes en el campo de la nanotecnología han llevado a la creación de una
exitosa gama de productos, particularmente para el mercado doméstico brasileño. “Estamos muy
interesados en que las compañías brasileñas puedan ofrecer productos de valor agregado”, explicó
Alessandro.
“Santa Constancia comenzó en campo de deportes competitivos con investigaciones que se
remontan a 1983, la primera compañía en Sur América en ofrecer algodón y Lycra en tejido de punto
circular, pero reconocimos prontamente que el algodón no era apropiado para los deportes
competitivos, lo que llevó al desarrollo de ‘supplex’ con Lycra, trabajando estrechamente con
DuPont en 1989″.”
En la atualidad, con el uso de la nanotecnología, estamos desarrollando textiles muy
especializados, con un título bajo y galga fina para uso en deportes activos y altamente
competitivos. Y, por supuesto, con los parámetros muy precisos necesarios para este tipo de tejido,
la rama Monforts al final de la línea de proceso es una clave importante, con su regulación de la
temperatura y su operación estable”.
Para Alessandro, con su experiencia en competiciones internacionales de yates, y con un hijo
que es campeón brasileño de “windsurfing”, no es sorprendente que la empresa produzca una exitosa
gama de textiles técnicos para uso en deportes competitivos.Otros segmentos del mercado que han
sido el enfoque de la compañía en años recientes han sido las prendas de uso íntimo y las prendas
para uso en la playa. Esto ha sido ayudado por el reconocimiento mundial de las hermosas playas de
Brasil y su asociación con la ropa de playa.
Estas últimas aplicaciones se han beneficiado grandemente de la tecnología aplicada de los
tejidos usados en deportes competitivos, debido, por ejemplo, a la proximidad y “tacto” de estos
tejidos con la piel.
Rama tensora de alto rendimiento, Montex 6500, de Monforts, instalada en Santa
Constancia.
Rama Montex
Con cinco ramas brasileñas ya instaladas, la firma optó por una rama Montex 6500 para el
aumento de su producción. Refiriéndose afectuosamente a varias de las ramas brasileñas como “sus
viejas damas que le han proveído con años de admirable servicio”, Alessandro agregó: “La rama
Monforts ofreció nueva tecnología para asegurar un alto rendimiento y positivos aspectos
ecológicos, incluyendo instalaciones de recuperación del calor que ahorran energía”.
“No nos hemos sentido desilucionados”, dijo Alessandro, “particularmente con los beneficios
de ahorros de energía provistos por el sistema de recuperación de calor”.
La rama de 8 cámaras está equipada también con el sistema Conti Clean, un proceso de
limpieza continua que elimina la necesidad de usar bandejas de filtro en cada cámara.
Una característica provista como estándar en todas las ramas Montex, el sistema de
recuperación del calor, montado en el techo, es apreciado especialmente por sus beneficios de
ahorro de energía. El calor del aire de salida es convertido en el intercambiador de calor para
calentar el aire fresco de combustión. Este aire fresco calentado entra luego a la rama a través de
conductos de aire fresco.
De acuerdo a Rodrigo Rodrigues, controlador de la rama, la Montex también tiene la capacidad
de alcanzar mayores velocidades y él puede seguir el proceso en cada cámara a través del sistema de
pantalla Monformatic. “La Montex puede manejar los tejidos con un alto contenido de viscosa a
mayores velocidades”, dijo Rodrigues.
Como ejemplo, citó un tejido de 90% viscosa y 10% Lycra, con un peso de 200 gm/m2, que pasa
a través de la rama Montex a una velocidad de 20 m/min. El tejido, de 160 cm de ancho, es cosido
como un rollo continuo de hasta 600 kg.
La compañía produce más de 25 millones de metros lineales de tejido al año, que varían de 40
gm/m2 a 400 gm/m2, trabajando tres turnos diarios, y 6 días y medio a la semana. Su planta está
localizada en un parque industrial cercano al aeropuerto internacional, y cubre un área de más de
40.000 m2.
“Estamos a la búsqueda constante de nueva tecnología en la industria y nuestra vinculación a
la misma. Necesitamos seguir siendo una compañía de mercado de estilo nicho o especializado y nos
continuamos especializando en innovaciones de tecnología y de estilo”.”Con la crisis económica
actual, estamos en una situación en donde sabemos que deberíamos planear para los próximos 10 años,
pero esta crisis lo hace pensar a uno en el día de hoy, y ya veremos que pasa mañana”.
“Tenemos una fuerte tradición, algunas marcas excelentes con tejidos de calidad, beneficios
en los costos, y casi una obsesión, buscando constantemente nuevas innovaciones para asegurar que
nuestros clientes tengan siempre la curiosidad para mirar nuestras colecciones – y si ellos miran,
siempre tenemos una oportunidad”, concluyó diciendo Alessandro.
Julio-Agosto de 2009