Industria Textil de ChileAdaptado de información delInstituto Textil de ChilePanorama de la
IndustriaTextil ChilenaCon la entrada en rigor del Tratado de Libre Comercio entre Chile y
EstadosUnidos, la industria textil chilena se está enfrentado ahora a nuevos retos.
Como es bien sabido, ya está en vigencia el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Chile y los
Estados Unidos, y esto ha significado un reto para la industria textil chilena, que ha tenido que
adaptarse para competir exiosamente en el mercado internacional.Si hay un sector que puede ser
considerado como la estrella del TLC es, sin lugar a dudas, el textil y de la confección. La
eliminación inmediata del arancel trajo un nuevo impulso a la inversión productiva, al punto de que
las inversiones se iniciaron aún desde antes de la llegada del acuerdo.Para los productos derivados
del algodón y ciertos componentes sintéticos, se negociaron cupos de acceso con una regla de origen
más laxa, ya que éstos requieren insumos que Chile no produce. Se acordó también un esquema de
cooperación aduanera para evitar la triangulación desde terceros países.Con el TLC, las industrias
más favorecidas serán las del vestuario y la confección de mayor valor agregado en la cadena
productiva sectorial, ya que allí existen mayores niveles arancelarios.“Con este acuerdo”, dijo el
Sr. Mario Rosales, jefe del equipo negociador chileno, “Chile tiene la oportunidad de poder entrar
a mercados que son muy exigentes, en materia de calidad y de diseño. Cuando terminamos las
negociaciones, me preguntaron sobre cuál era mi mayor alegría, y viéndolo en términos sectoriales,
básicamente es el rubro textil”.“Como un ejemplo de los cambios”, agregó el Sr. Rosales, “se puede
citar la instalación de Tom James que compró la planta conocida anteriormente como Linos Tomé y
empezó a operar como Crossville y eso se tradujo en el empleo de 400 a 500 personas. Pero todo esto
es como la punta de un iceberg, ya que hay condiciones para que podamos asistir al renacimiento de
la industria textil chilena exportadora”.Inversiones“El tema de la inversión es más importante que
lo comercial a mediano plazo”, continuó diciendo el Sr. Rosales. “Hay un listado de unas 25
empresas que se han venido instalando en los últimos dos o tres años. Estoy convencido de que con
el acuerdo con Estados Unidos, así que con el acuerdo con Europa, habrá nuevos incentivos para que
otras empresas puedan invertir en Chile, para atender desde aquí a otros mercados y, al mismo
tiempo, aprovechar la red de acuerdos comerciales, porque una empresa que se instala en Chile tiene
un mercado de alrededor de 1.300 millones de consumidores. Hay un gran interés también de
inversionistas brasileños y argentinos, por ejemplo, que han pensado en instalarse en Chile para
exportar calzado u otros productos”.“Al atraer la inversión”, explicó el Sr. Rosales, “tenemos un
efecto permanente de generar riqueza en Chile. Son inversiones que requieren de personal calificado
y, por lo tanto, estamos generando empleos de alto nivel, más intensivo en conocimientos, como
ingenieros, abogados, economistas, y expertos en rubros especializados como la óptica”.Sin embargo,
la ardua competencia que el sector textil ha debido enfrentar en Chile de los productos importados
chinos amenaza con trasladarse a Estados Unidos y la Unión Europea. A partir de enero del 2005,
ambos mercados, junto con Canadá y Noruega, eliminaron las cuotas de importación para los textiles
de este país asiático. Debido a esto, las empresas chilenas han tenido que prepararse para no
perder los mercados ganados.En relación a esta situación, el presidente del Instituto Textil de
Chile, el Sr. Mario García, manifestó que si China no acepta eliminar todas sus ayudas a sus
gremios, el sector que él representa pedirá compensaciones en igual proporción a los subsidios
chinos. Como un precedente importante para la industria textil chilena, cabe señalar que el Sr.
García, pidió salvaguardias de productos de origen chino. La medida fue recomendada por el
Instituto de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad, en la que se pidió un
plazo de 200 días para categorías de productos.Futuro con esperanzaLa industria textil chilena está
mirando el futuro con esperanza, ya que las exportaciones de productos textiles chilenos mostraron
un crecimiento de un 21% durante el primer trimestre del 2004, en comparación con el mismo periodo
del año inmediatamente anterior.De hecho, Textiles Pollak, una de las principales empresas
textileras del país, concretó exportaciones por varios millones de dólares, y espera pedidos aún
más impresionantes en los próximos meses.De acuerdo al Sr. Mario García, las exportaciones de
productos textiles chilenos hacia Estados Unidos, bajo el marco del TLC, deberán elevarse sobre
$110 millones de dólares en los próximos años. “Las exigencias que imponen las Normas de Origen
debieran producir un aumento de nuestra actividad en toda la cadena productiva”, señaló el Sr.
García.“Planteamos la preocupación por el abastecimiento de hilados de algodón y sus mezclas, ya
que las pocas fábricas de ellos existentes en el país no se encuentran en condiciones de producir
los volúmenes requeridos”, añadió el Sr. García.Según el Instituto Textil, Porvenir, la segunda
ciudad más austral del mundo después de Puerto Williams, podría desplazar a Patronato como enclave
textil de Chile. En Porvenir se han instalado recientemente cuatro empresas del sector, siendo las
más conocidas Eurosport, que desde allí abastece de la ropa Ellesse al resto del país; y Arja
Textil, que produce 25.000 kilos de hilados al mes.Otra empresa que también ha aprovechado los
acuerdos del TLC es Monarch, conocido fabricante chileno de calcetines y panty-medias, con ventas
anuales superiores a los $15 millones de dólares. Con miras al mercado externo, la compañía se ha
embarcado en un ambicioso plan de inversiones, que van desde los viajes de negocios hasta la
introducción de nuevas tecnologías y materias primas, para ofrecer productos que sean del agrado de
los consumidores externos.Por su parte, la compañía Caffarena, fundada en 1920 por Blas Caffarena
Chioza, es también líder en el mercado de pantys y medias, con un volumen de ventas superior a $20
millones de dólares al año. La empresa da empleo a 800 personas en la fábrica y a 500 en el área de
ventas. En total, sus exportaciones representan alrededor del 20% de la facturación, en su mayoría
a los Estados Unidos.Marzo-Abril 2006
