Nuevos Desarrollos en Fibras, Hilos y Telas

Lenzing ofrece fibras amigables con el medio ambiente EcoVero™ a base de pulpa de madera. Fotografía cortesía de Sadia Rafique/Lenzing.

Sistemas de circuito cerrado y economías circulares son dos formas en que las industrias de fibras, hilos y tejidos están abordando problemas de sostenibilidad.

Kavita Mathur, PhD

El capítulo de fibra e hilado se lanzó en la ITMA 2011 en Barcelona en respuesta a las demandas de la industria de una plataforma única de abastecimiento para fabricantes de textiles y prendas de vestir. Desde su integración a la línea ITMA, este capítulo ha seguido creciendo. En ITMA 2015, el capítulo incluyó otro subcapítulo sobre fibras e hilos reciclados para respaldar el compromiso de la industria con la sostenibilidad. Y para la ITMA 2019, el capítulo se amplió para incluir también una innovadora sección de telas. El capítulo de fibra, hilo y tela ofreció soluciones de materias primas innovadoras y ecológicas con un gran enfoque en el reciclaje, la reducción de residuos y la eficiencia de producción en ITMA 2019.

De acuerdo con un nuevo informe de Grand View Research, el mercado textil mundial fue valorado en $925.3 mil millones en 2018 y se proyecta que alcance aproximadamente $1.2 billones para 2025 a una tasa de crecimiento anual compuesta de 4.24 por ciento. Dentro de este crecimiento, se estima que el mercado de hilados textiles tendrá un valor de $12.6 mil millones para 2020 según la empresa de investigación B2B MarketsandMarkets ™. A medida que la industria textil mundial continúa creciendo, está generando una mayor demanda de materias primas, nuevas aplicaciones y nuevos procesos de producción.

Fuente: www.government.nl/topics/circular-economy/from-a-linear-to-a-circular-economy

El sector de fibra e hilo es una parte integral de las industrias textil y de la confección. Para mantenerse competitivos, estas industrias se esfuerzan por la mejora continua y, por lo tanto, buscan constantemente soluciones innovadoras para satisfacer las demandas cambiantes y los estándares de la industria. Estos estándares están orientados principalmente a soluciones sostenibles como reciclaje, reducción de residuos, eficiencia de la producción y producción en circuito cerrado. Con la creciente participación de los gobiernos, estos estándares ahora se están volviendo cruciales para el comercio y los negocios.

Es obvio que la sostenibilidad es una preocupación creciente de las marcas, los fabricantes de equipos y telas, así como de los consumidores. La industria todavía está muy centrada en el reciclaje, lo que claramente no es suficiente. Ha habido un mayor impulso para el ahorro de agua, la durabilidad y la gestión de residuos, así como la reducción de emisiones, la contaminación del agua y la huella de carbono. El capítulo de hilos, fibras y telas en la ITMA 2019 ofreció un componente crucial de la industria textil a medida que más empresas industriales y de moda buscan materiales innovadores y sostenibles.

Soluciones Sostenibles

En segundo lugar después del petróleo, la industria textil es uno de los mayores contribuyentes a los efectos nocivos para el medio ambiente. De acuerdo con la Asociación de las Naciones Unidas para la Moda Sostenible, es responsable de aproximadamente el 10 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero y el 20 por ciento de la producción de aguas residuales a nivel mundial. Como resultado, la necesidad de que las empresas textiles cambien su enfoque de fabricación y producción, está aumentando drásticamente. En general, las empresas están desarrollando fibras e hilos como soluciones innovadoras para abordar la necesidad de sistemas más sostenibles. Hay dos iniciativas importantes de sostenibilidad expuestas por varias compañías: Moda Circular y Sistema de Circuito Cerrado.

Economía Circular/Moda Circular

La industria textil actual sigue una estructura económica lineal con una vida útil muy corta: los textiles se obtienen, producen y finalmente se tiran. Esta estructura económica, aunque rápida, es muy ineficiente, insostenible y perjudicial para el medio ambiente. Recientemente, la economía de la reutilización ha ganado mucha atención para abordar esta situación. Esta plataforma mejora el proceso lineal reutilizando textiles una y otra vez. Sin embargo, este tipo de ciclo finalmente termina cuando el artículo ya no se puede reutilizar o reciclar y finalmente termina en el bote de la basura como lo haría en una economía lineal. Este tipo de estructura económica se conoce como economía circular o moda circular, que no solo aborda la capacidad de extender la vida útil de un producto, sino que también protege el medio ambiente. En una industria de la moda circular, cada aspecto del proceso de producción es impulsado a ser circular, ético y, en última instancia, ecológico y sostenible. Esto incluye reciclaje de materiales, uso de soluciones biodegradables, suministro ético de materias primas y uso de procesos de fabricación y producción más eficientes.

(En el sentido de las manecillas del reloj desde la parte superior izquierda): bluesign® standard, Global Recycled Standard, EU Ecolabel, Global Organic Textile Standard, y Oeko-Tex STANDARD 100 por OEKO-TEX® eco labels.

En la ITMA 2019, las compañías enfatizaron sus iniciativas de moda circular al mostrar procesos eficientes de fabricación y producción que incluyen emisiones reducidas, desechos, agua, productos químicos y uso de energía; encontrando formas de biodegradar los materiales post-consumo para cerrar completamente el ciclo. Varias empresas pudieron garantizar la credibilidad de sus productos mediante el uso de etiquetas ecológicas, incluido el estándar bluesign®, el Estándar Global de Textiles Orgánicos (GOTS por sus siglas en inglés), la etiqueta ecológica de la UE, el ESTÁNDAR 100 de OEKO-TEX® y el Estándar Global Reciclado (GRS por sus siglas en inglés).

El estándar bluesign proporciona un medio para realizar pruebas preliminares y analizar todos los componentes necesarios para fabricar un producto antes de que esos componentes entren en producción. Analizar la huella ambiental de estos componentes, ayuda a eliminar las fuentes de contaminación ambiental nociva desde el principio.

El certificado GOTS asegura que las fibras que entran en producción son orgánicas, la producción es ética tanto a nivel ambiental como social, y que el consumidor recibirá un producto fabricado de manera responsable. La etiqueta ecológica UE identifica los productos que se fabricaron teniendo en cuenta el medio ambiente para los procesos de producción, los métodos de distribución y las capacidades de eliminación segura. El Estándar 100 de Oeko-Tex es un sistema de certificación para todos los aspectos del proceso de fabricación y producción, que ayuda a salvaguardar el medio ambiente y la salud de los consumidores al garantizar que no se utilicen productos químicos nocivos durante el proceso de producción.

La etiqueta GRS se proporciona a las empresas que utilizan contenido reciclado en sus productos y certifica que el material reciclado utilizado es rastreable, ecológico y está etiquetado correctamente.

Archroma, con sede en Suiza, proporciona soluciones químicas textiles “seguras, eficientes y mejoradas”, de acuerdo con la compañía. Sus productos químicos están aprobados por bluesign®, certificados por GOTS, de base biológica, sin químicos perfluorados (PFC), sin formaldehído y sin metales. Al certificar sus productos con etiquetas ecológicas y utilizar prácticas sostenibles, Archroma puede proteger eficazmente el medio ambiente contra las aguas residuales nocivas y también ahorrar valiosos recursos naturales.

Clariant International Ltd., con sede en Suiza, demostró sus iniciativas de sostenibilidad al introducir hilos teñidos en pasta que usan un 98 por ciento menos energía y un 99.9 por ciento menos de agua en comparación con los hilos teñidos en paquete. Además, Clariant introdujo nuevos concentrados de color con aditivos funcionales tales como hidrófobos y anti manchas libres de flúor para poliéster; concentrados de color de extensor de cadena para ayudar a reciclar poliéster; y concentrados de color suaves al tacto para fibras, filamentos y no tejidos de polipropileno, poliéster, poliamida y ácido poliláctico.

DBT Fiber, con sede en Italia, promovió la sostenibilidad en sus procesos de hilado básico largo y corto con el objetivo de optimizar el impacto ambiental y social a través de su modelo de negocio sostenible en una economía circular. Como parte de su Eco Fiber Green Action Solutions, la compañía instaló un sistema fotovoltaico con una capacidad de más de 650 kilovatios, que genera ahorros en emisiones de dióxido de carbono (CO2) equivalentes a 390 toneladas por año. Además, su planta geotérmica reemplazó el uso de combustibles y, por lo tanto, eliminó cualquier tipo de emisiones a la atmósfera. DBT también tiene un sistema para recuperar materiales de desecho de sus procesos de fabricación y reciclar el 100 por ciento de todos los materiales de empaque.

En respuesta a la necesidad de conciencia ambiental, Nylstar S.L., con sede en España, presentó su Programa de sostenibilidad NATEO, que se centra en iniciativas de cero contaminación del agua, ahorro de agua y reciclaje, para su marca de nylon Meryl®. Los hilos de nylon Meryl NATEO ofrecen una alternativa ecológica al algodón y abordan las opciones de reciclaje. Los hilos Meryl® EcoDye se tiñen usando un método de tintura de pasta en el que se agrega el color a la pasta de polímero antes de la extrusión. De acuerdo con la compañía, este método proporciona una excelente solidez del color y absorción del color al tiempo que elimina la necesidad de agua durante el proceso de tintura. Meryl Cotton 66 es un hilo que se fabricó en respuesta al daño ambiental causado por la industria del cultivo del algodón. Este hilo se ve y se siente como el algodón y elimina la necesidad de grandes cantidades de agua y productos químicos agrícolas que se requieren para el cultivo del algodón. Meryl Eco Denim es una tecnología que elimina hasta 11,000 litros de agua por par de jeans fabricados. Nylstar también ofrece Meryl® Skinlife, un tratamiento antimicrobiano a base de iones de plata que elimina los olores al tiempo que mantiene un ambiente equilibrado para la piel y, por lo tanto, no requiere que las telas se laven con tanta frecuencia. En su programa de cero contaminación del agua, Nylstar también ha desarrollado una variedad de hilos de alto rendimiento que no incorporan ningún tratamiento químico tópico bajo la marca Meryl® Touch.

La solución de hilo teñido reciclado YNVIRON ™ de Antex, empresa con sede en España, reduce significativamente las emisiones nocivas de gases de efecto invernadero, ahorra energía, reduce el consumo de agua y conserva los recursos naturales, según la compañía. La fibra, hecha con una mezcla de desechos postindustriales y postconsumo, se colorea con una solución de teñido de pasta.

Beaulieu International Group, Bélgica, presentó su fibra corta UltraBond que no requiere látex u otros aglutinantes cuando se usa en aplicaciones de no tejidos. Este producto permite una disminución significativa en el consumo de agua que resulta en una reducción del 93 por ciento en el uso de energía, y reduce las emisiones de CO2 en más del 35 por ciento sin la adición de ningún otro agente.

Lenzing AG, con sede en Austria, compañía productora de fibras a base de pulpa de madera amigables con el medio ambiente, mostró las fibras EcoVero ™ en ITMA. De acuerdo con la empresa, la producción de fibras EcoVero “genera hasta un 50 por ciento menos de emisiones e impacto en el agua en comparación con la viscosa genérica”.

Tencel ™ x Refibra ™ es otro producto nuevo que es una combinación de restos de algodón y pulpa de madera hechos con el eficiente proceso de fabricación de circuito cerrado de Lenzing. Según Lenzing, este producto es 100% derivado biológico, compostable y biodegradable, y da como resultado una reducción general del 95% en el agua utilizada.

S. Vilarrasa, empresa con sede en España, ofrece un hilo de algodón reciclado hecho con desechos de prendas de algodón de pre-consumo.

S.Vilarrasa S.A., con sede en España, un fabricante de hilos tejidos de extremo abierto, introdujo un hilo de algodón reciclado que es fabricado utilizando residuos de prendas de algodón de pre-consumo. Esto reemplaza al algodón virgen, lo que reduce el uso de agua, productos químicos agrícolas y tintes para prendas. El hilo de algodón reciclado de Vilarassa da como resultado una reducción de 4,800 kilogramos (kg) de agua, 16.5 kg de productos químicos, 233.8 kg de emisiones de CO2, 3,500 kg de contaminación del agua y 500 kilovatios hora de energía.

La compañía cuenta con el certificado GTS que garantiza que su material reciclado es verificado.

Producción en Circuito Cerrado

En base a las estadísticas más recientes proporcionadas por la Agencia de Protección Ambiental de E.U. (EPA por sus siglas en inglés), se generaron 16.9 millones de toneladas de textiles en 2017 en los Estados Unidos. De estas, 11.2 millones de toneladas de residuos textiles se depositaron en vertederos y solo se reciclaron 2.6 toneladas. Este desperdicio no solo afecta la condición ambiental de la tierra, sino que también contribuye significativamente a los desechos artificiales que contaminan los océanos. Cada año, más de 8 millones de toneladas métricas de desechos plásticos ingresan al océano.

Varios expositores de ITMA 2019 en el capítulo de fibras, hilos y telas abordaron un sistema de producción de circuito cerrado a través de medios de reciclaje y reducción de residuos.

Establecido por primera vez en ITMA 2015, el Premio a la Innovación Sostenible tiene como objetivo alentar a las empresas a abordar la sostenibilidad textil proponiendo soluciones innovadoras. El premio de 2019 fue para la empresa de mezclilla con sede en Italia Candiani S.p.A. por su Re-Gen, un tejido de “mezclilla circular” creado con materias primas regeneradas y recicladas. La tela está compuesta por 50 por ciento de Tencel x Refibra lyocell y 50 por ciento de residuos de algodón reciclado post-industrial de la propia operación de Candiani. Además, Refibra incorpora tecnología de identificación de fibra, creando transparencia en la cadena de suministro.

Seaqual ™, una fibra de Textil Santanderina S.A., con sede en España, destaca su misión de reducir la cantidad de desechos que hay actualmente en el océano y disminuir la entrada de más desechos al mismo. Seaqual es una fibra de plástico marina 100 por ciento reciclada, además, la compañía se asocia con pescadores locales para ayudar a recolectar los desechos para producir la fibra. Textil Santanderina informa que por cada kg de fibra Seaqual creada, elimina 1 kg de basura del océano.

Algunas de las fibras de Nylstar’s Meryl también se crean teniendo en cuenta las vías fluviales y el océano. El programa NATEO asegura que las fibras Meryl de alta tensión no depositan microplásticos en el medio ambiente. Además, el programa de reciclaje de Nylstar ofrece dos productos: fibras recicladas Meryl®, que reutilizan los desechos de postproducción para crear una nueva materia prima; y Meryl® Pure, que está diseñado para ser 100 por ciento reciclable mediante el uso de estiramiento natural en lugar de elastano para estirar en la ropa.

Maria Ohisalo, Ministra del Interior de Finlandia, con un vestido de noche hecho de materiales de Infinited Fiber Company.

Infinited Fiber Company, con sede en Finlandia, mostró una solución de reciclaje innovadora en ITMA no solo para residuos textiles pre y postconsumo, sino también para desechos de cartón y agrícolas. Su material de desecho se separa, se convierte en un líquido y luego se convierte en una fibra de alto rendimiento. Este sistema permite a la compañía reducir su consumo de agua en 20,000 litros por kg de algodón y reduce en gran medida las emisiones de CO2.

Como se mencionó anteriormente, el producto YNVIRON de Antex tiene como objetivo reducir el consumo de energía y los impactos ambientales a través del reciclaje de residuos post-industriales y post-consumo. Los desechos que se recolectan se trituran, funden y extruyen antes de convertirse en un chip para su procesamiento futuro.

Las telas ecológicas tejidas de Haksa Tekstil San Tic A.S. en Turquía, cuentan con hilos que utilizan materias primas recicladas a partir de desechos textiles de preproducción para crear un producto que a su vez ahorra miles de millones de litros de agua, ahorra miles de toneladas de fibra de algodón y reduce miles de toneladas de contaminación química que ingresa al medio ambiente, según información de la compañía. Los desechos utilizados pueden ser combinaciones de algodón, poliéster, Unifi’s Repreve®, acrílico o lana.

Además de sus fibras EcoVero, Tencel y Refibra, Lenzing ofrece Veocel ™, una combinación de restos de algodón y pulpa de madera para no tejidos. Las fibras Veocel cuentan con la tecnología EcoDisperse, que permite que los pañuelos de papel higiénico húmedos no tejidos se desintegren y se biodegraden después de la descarga. Las fibras Veocel de Lenzing producidas con la tecnología EcoColor se tiñen con pigmentos de color para embeber profundamente el color mientras se usa agua y energía con moderación durante todo el proceso de producción para reducir el impacto ambiental. Para garantizar que todos los desechos se utilicen en sus procesos de producción, Lenzing utiliza una biorrefinería para reutilizar cualquier material de madera sobrante. Esto incluye ácido acético de base biológica, furfural, lignosulfonato de magnesio, carbonato de sodio, sulfato de sodio y xilosa. Estos coproductos de base biológica pueden usarse en la industria alimenticia, animal, farmacéutica, cosmética, química y textil para diversas aplicaciones.

Kelheim Fibers GmbH, con sede en Alemania, introdujo fibras especiales de viscosa que se fabrican con celulosa al 100 por ciento, lo cual permite que las fibras sean completamente biodegradables. Kelheim trabaja con CanopyStyle para garantizar que no se obtenga madera de bosques antiguos o en peligro de extinción.

Otra tendencia observada en este capítulo de ITMA 2019 fue la forma de hacer alternativas biodegradables a los materiales sintéticos utilizados actualmente en el mercado textil. Nan Ya Plastics Corp., con sede en Taiwán, mostró su filamento de poliéster biodegradable GREEN ONE. Las pruebas han demostrado que Green One se biodegrada en los vertederos en CO2, metano y materia del suelo en aproximadamente 98 días. Este material se puede combinar con poliéster reciclado de Nan Ya, poliéster sin metales pesados y biopoliester.

El fabricante de tecnología de fibra artificial Oerlikon, Suiza, introdujo un nuevo método de producción de fibra para reciclar completamente los filamentos parcialmente orientados y estirados a través de un proceso de homogeneización, secado, extrusión, prefiltración, un filtro de vacío de BB Engineering, así como granulación y aguas abajo aplicación de fusión. Su proceso permite que todos los residuos de hilatura vuelvan a la producción.

Beaulieu también mostró una gama de fibras, hilos y textiles técnicos que pueden replicar cualquier tipo de tecnología de hilado de fibras cortadas utilizando diferentes tipos de polímeros y aditivos con una variedad de secciones transversales. Estas fibras cortadas de alta firmeza HT8 ofrecen resistencia única a la tensión elevada sin comprometer el estiramiento.

The Woolmark Company en Australia, mostró su iniciativa cradle to cradle que evaluó el impacto de sus productos en el medio ambiente para garantizar que contribuyan a una estructura económica circular y sostenible. Para medir la sostenibilidad de los productos, cradle to cradle evalúa la salud de los materiales, las capacidades de reutilización, la energía renovable, la contribución de las emisiones de carbono, el uso del agua y el impacto social. Woolmark trabaja con la empresa matriz Australian Wool Innovation Ltd. para investigar, desarrollar, certificar, educar a la comunidad y proporcionar productos de lana de calidad para la industria textil. Dado que la lana es una fibra natural inherentemente sostenible que es 100% biodegradable, no tiene un impacto negativo en el medio ambiente. Woolmark defiende realizar evaluaciones del ciclo de vida para evaluar el impacto ambiental de un producto desde el comienzo de su vida hasta el final. Esto incluye cómo se obtuvo el material, el proceso de fabricación, el uso y la eliminación del producto.

La Industria Textil Frente Al Medio Ambiente

La industria textil contribuye a los efectos ambientales nocivos y la generación de residuos en el ecosistema. Como resultado, la necesidad de que las empresas textiles cambien su enfoque de fabricación y producción está aumentando drásticamente. ITMA 2019 proporcionó una plataforma integrada de soluciones ecológicas que incluyen reciclaje, reducción de desechos, al igual que reducción y prevención de la contaminación. Este tema fue evidente en todos los ámbitos, ya que las empresas exhibieron su gama de sus fibras, hilos y telas para abordar problemas de sostenibilidad.


Kavita Mathur, profesora asociada de Textiles y Confección, Tecnología y Gestión, en el Wilson College of Textiles del Estado de Carolina del Norte en Raleigh, NC.


Mayo-Junio de 2020

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