“La industria textil es parte de la solución a los problemas que acarrea nuestro país hace décadas” — Luciano Galfione, presidente de Fundación ProTejer
Jannyn Solís, Editora Asociada
Luciano Galfione proviene de una familia textil, su abuelo era textil, su papá es textil y sus hermanos y él lo son desde la cuna. Tienen una hilandería de fibras sintéticas con más de 75 años de presencia en el mercado textil argentino, y recientemente han incorporado tejeduría de punto y terminación de telas deportivas. Poseen tres fábricas, dos en la Ciudad de Buenos Aires y una en la Ciudad de La Plata en la Provincia de Buenos Aires. Emplean alrededor de 200 personas y fabrican cerca de 400Tn/mes entre hilados y tejidos. Para él la industria y en particular la textil es parte de su ser, corre por sus venas, por lo que la fábrica siempre formó parte de su vida, mucho más obviamente luego de haber terminado los estudios de ingeniería donde ya se incorporó activamente y vida completa.
Su relación con Fundación ProTejer empezó el año 2004, un año después de la creación de la Fundación, cuando lo invitaron a participar de un programa que se llamó “Nueva Generación” donde a partir de una capacitación en liderazgo quedaron vinculados. Así creciendo dentro de la institución dirigiendo el Departamento de Comercio Exterior primero, para luego pasar al Comité Ejecutivo y llegar a la Presidencia. “Durante muchos años he acompañado, me he formado y trabajado incansablemente para defender y potenciar nuestro sector. Hubo tiempos mejores, peores, pero siempre con la convicción de que la industria textil es parte de la solución a los problemas que acarrea nuestro país hace décadas” comenta Galfione para iniciar la entrevista que en exclusiva otorgó a Textiles Panamericanos.
TP: ¿Qué tipo de servicios y apoyos ofrece Fundación ProTejer a sus miembros?
Galfione: La Fundación ProTejer tiene como misión asistir, desarrollar, contener e integrar a la cadena de valor agro-industrial textil y de confecciones de la República Argentina. Somos una especie de ThinkTank del sector textil donde elaboramos propuestas, propiciamos debates, tratamos de poner a nuestro sector en la agenda, con el claro objetivo de hacer crecer y desarrollar nuestra cadena de valor. No somos una cámara, ni una federación, nuestro consejo se conforma no solo de empresarios, sino también participan el Sindicato Textil, las Universidades, centros tecnológicos como Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), es decir, todo el arco que hace a los protagonistas de nuestra querida industria. Contamos con alrededor de 250 miembros activos.
TP: Tu compromiso al asumir la presidencia de Fundación ProTejer fue presentar al gobierno un plan de desarrollo sectorial con propuestas para el desarrollo del sector textil, ¿cuál es el status de dicho plan?
Galfione: Tenemos un plan de desarrollo sectorial muy ambicioso y muy extenso. La actividad manufacturera a escala mundial se encuentra atravesando un proceso de verdadera transformación de su organización productiva y logística, y de redefinición de las formas de consumo, en el que la industria textil aparece como un actor clave de estas transformaciones. Por un lado, la aparición de nuevas fibras y tejidos, y la constante expansión del uso de productos textiles, está transformando a los materiales textiles en insumos fundamentales para el desarrollo y adopción de tecnología por otras ramas industriales. La revolución planteada por la “Industria 4.0” en la manufactura, con cambios a nivel de robótica, comunicación, informática y manejo de la información, está modificando la producción y comercialización de productos textiles, resignificando la importancia de la agregación de valor realizada por la producción manufacturera. A nivel de consumo, cambios asociados al crecimiento poblacional y la mayor conciencia ecológica y social están promoviendo la vuelta hacia una producción basada en lo natural, reinstalando la importancia de las fibras originadas en la naturaleza, y valorizando la forma en que se han producido los bienes textiles. Nuevas producciones cerca de los centros de consumo, que reconfiguran totalmente el escenario productivo y es una oportunidad enorme para nuestro país. Todos estos cambios despliegan un abanico enorme de caminos a seguir por nuestra cadena de valor, que hoy cuenta con las fortalezas necesarias para poder avanzar en cualquiera de estas estrategias, por contar con infraestructura productiva de clase mundial y por estar dotada con un factor estratégico como es la provisión de fibras naturales con alto potencial de crecimiento (algodón, lana y camélidos). A su vez, su presencia territorial en todo el país y capacidad productiva desarrollada en todos los eslabones de la cadena da cuenta, junto con el conocimiento de sus recursos humanos y su reconocida capacidad de generación de valor a través del diseño y marcas, del gran potencial que posee hoy nuestra cadena de valor para encarar los desafíos que plantea el nuevo escenario mundial, al tiempo de posicionarse como un sector central en el desarrollo económico y social de nuestro país. Para cada uno de estos lineamientos generales tenemos propuestas de corto, mediano y largo plazo, claro que nuestro país está viviendo una situación coyuntural compleja que hace difícil encarar todos estos temas.
TP: ¿En qué consiste el convenio de colaboración que recientemente firmó Fundación ProTejer con la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), y cuál es su relevancia considerando la falta de mano de obra calificada en el sector textil y de la confección?
Galfione: El sector de la confección es clave para nuestra cadena de valor y dentro del mismo el rol de los diseñadores tiene un papel preponderante. Nuestro diseño tiene reconocimiento a nivel mundial y es la puerta de acceso a nuestras exportaciones donde tenemos una potencialidad enorme aún no explotada en toda su magnitud. En este marco la relación con las universidades, en este caso UADE, es de suma importancia por muchas razones. Primero para acercar a los estudiantes al sector privado, después para que conozcan lo que se produce y cómo se produce y las oportunidades que hay en nuestro entramado productivo. Ocurre que muchas veces los estudiantes diseñan con materias primas que luego a la hora de materializarlo en colecciones no encuentran y a la vez los empresarios no consiguen diseñadores que se adecúen a las necesidades del mercado argentino. Por eso es muy importante esa interrelación permanente entre el sector productivo y los profesionales del futuro, en nuestro país a diferencia de otros, el mundo productivo está lejos del educativo y viceversa, esa es nuestra función, achicar esa brecha y ahí estamos.
TP: 2022 fue un año marcado por fuertes inversiones en el sector textil nacional, ¿en qué rubros principales se hicieron dichas inversiones?
Galfione: La Argentina ha dado un salto tecnológico enorme desde el año 2021, donde tanto este, como el 2022 marcaron récord histórico de inversiones en toda la cadena, mucho más fuerte en el área industrial donde el sector es capital intensivo y donde la incursión de la industria 4.0 ha sido una revolución. Hoy todavía esas inversiones están empezando a materializarse puesto que involucran no solo la incorporación de máquinas, sino también ampliación de plantas productivas, nuevas plantas, instalaciones, etc. Hoy la Argentina podría decir que está en la frontera tecnológica en el área textil.
TP: ¿Cuál ha sido el panorama en el primer semestre de este año en materia de inversión y qué se espera para los siguientes meses?
Galfione: El año 2023 está marcado por una coyuntura compleja para nuestro país producto de la falta de divisas que hace que sea muy complicado invertir en maquinaria de origen externo, por lo tanto, las inversiones que se están realizando son las que se iniciaron en el 2021/2022 y que todavía están en proceso de materializarse. Algunas ya están en pleno funcionamiento, otras en proceso de puesta en marcha y muchas otras esperamos en los próximos meses empiecen a reflejarse en más y mejores productos
TP: ¿Sigue afectando al sector textil el acceso a insumos y divisas? ¿Cuál es la situación actual en estos rubros?
Galfione: Como comenté más arriba, hoy esta situación es el principal obstáculo que encuentra el sector para desarrollarse. La falta de acceso a divisas no sólo afecta a nuestras empresas, tiene un efecto letal en el consumo, lo que hace un círculo vicioso donde menos producción significa menos consumo y así siguiendo, lo que perfora el poder adquisitivo de la población, en un contexto inflacionario que complejiza aún más la producción y fundamentalmente el empleo. La Argentina no produce todo, como todos los países necesita de insumos importados, repuestos, etc. y estos no son sustitutivos de la producción nacional, en muchos casos son complementarios por lo que es necesario revertir este problema urgentemente.
TP: A finales del año pasado Fundación ProTejer se pronunció por un congelamiento de precios en el sector textil para combatir la inflación, ¿de qué manera el problema inflacionario sigue afectando a los industriales textiles y de la confección?
Galfione: El problema inflacionario es transversal a toda la economía argentina y no es exclusivo de nuestro sector. Es un problema que nos excede y que creo no tiene una solución mágica, creo que la mejor manera de contribuir a paliar esta situación es hacer lo que estamos haciendo desde el 2021 — invertir, invertir, invertir. Esto necesariamente va a traer más productos, más competitivos, de mayor calidad y en definitiva es la mejor manera de contribuir a la baja de la inflación. Claro está que es una solución de mediano plazo, en el mientras tanto hay que tomar medidas antipáticas y tratar de sostener el entramado productivo sin afectar o afectando lo menos posible el poder adquisitivo de la población. Soy claro y tajante, nuestro negocio no es aumentar precios y ganar más con lo mismo, nuestro negocio es vender más y a más gente, para eso nuestros trabajadores y la sociedad en general debe tener buenos salarios, porque es la población la que luego compra lo que fabricamos, lo complejo es lograr que esa actualización no redunde en más inflación.
TP: ¿Cuáles son los principales factores que afectan hoy en día la competitividad del sector textil y de la confección en Argentina?
Galfione: La argentina tiene un problema de falta de competitividad sistémica que arrastra ya hace décadas y que es transversal a toda la economía. Esto hace que todo lo que nosotros producimos en forma eficiente en nuestras fábricas llegue a precios no competitivos al consumidor. En algún momento creo que debemos dar este debate porque la tendencia siempre es pensar que la solución a esto es importar y esa historia ya la hemos probado infinidad de veces y lo único que logramos es desocupación, pobreza y destrucción de entramados productivos que luego lleva mucho tiempo volver a desarrollar. En primer lugar, creo que tenemos un sistema impositivo absolutamente arcaico donde tributamos sobre los bienes y no sobre las personas, lo que hace que sea mucho más injusto con el que menos tiene y además fomenta la evasión porque es un gran negocio. El costo logístico es enorme, es más barato enviar un contenedor a China que transportarlo desde Catamarca a Buenos Aires, los costos bancarios, tarjetas de crédito y financiación son de las más altas del mundo. Y por último los alquileres en shoppings donde se tienen, por ejemplo, variables por ticket, expensas no auditables, costos de personal de seguridad que hay que aceptarlos como son, en fin, un tren fantasma que dilapida todo aquello que se quiera comerciar y que provoca irritación en la opinión pública, donde en realidad nosotros somos rehenes, pero debemos cargar con el problema.
TP: La adopción de un acuerdo de libre comercio entre la UE y el Mercosur, ¿qué repercusiones traería a la industria textil y de la confección de Argentina?
Galfione: Todo depende del acuerdo al que finalmente se llegue. Puede ser una oportunidad o puede ser muy negativo. Nuestra propuesta siempre fue que sea “yarn-forward” es decir que el origen se acredite desde el hilado, donde se garantice que todo el agregado de valor se haga en la comunidad y no sea una puerta abierta para triangular producto del sudeste asiático. Por otro lado, hay que estar atentos a otros requisitos como el caso de normativa técnica y/o ambiental que muchas veces se utiliza como barrera pararancelaria y que limita la entrada de productos de origen local.
TP: Desde tu punto de vista, ¿en qué etapa de la industria 4.0 se encuentran los fabricantes textiles de Argentina?
Galfione: Como dije anteriormente la industria textil ha hecho y está haciendo un salto tecnológico enorme, sin embargo, tenemos un sector muy atomizado donde no todos han llegado a esto, pero sin lugar a dudas es la clave para darle sustentabilidad al sector. Aquí las empresas más pequeñas son las que más les cuesta y están en etapas incipientes, mientras que en las grandes esto ya está en pleno despliegue.
TP: En términos de sostenibilidad, ¿podrías compartirnos algunas iniciativas o proyectos importantes de industriales argentinos que vale la pena dar a conocer?
Galfione: Otro de los temas claves de cara al futuro, la sostenibilidad está pasando de ser una acción de responsabilidad social empresaria diría yo, a ser un requisito. El mundo por delante va a tomar esto como una bandera y no sólo se usará para hacer un mundo mejor, sino que se usará como medida de comercio para proteger producciones, ya no sólo lo importante va a ser el precio, sino que también será importante en qué condiciones se produce. Dicho esto, y al igual que las iniciativas 4.0, la sostenibilidad por ahora está reducida a pocas empresas o a empresas que lo tienen como requisito como es el caso de las tintorerías, pero como ejemplo de esto podemos citar nuevas formas de producción con consumos de agua o energía reducidos, fabricación de hilados a partir del reciclado de prendas en desuso. Nuestro país tiene una gran ventaja en esta materia al ser un gran productor de fibras naturales tanto de origen animal como de origen vegetal, lo que propicia mucho este tipo de iniciativas.
TP: ¿De qué manera afectará el resultado de las elecciones de este 2023 para la presidencia de Argentina al sector textil y de la confección?
Galfione: Siempre los cambios de gobierno han sido determinantes en el desarrollo de nuestra cadena de valor. Como dije antes, nuestro sector está sumido de un gran prejuicio que muchas veces lleva a los gobiernos a tomar medidas desacertadas e inconsultas con consecuencias letales para nuestro sector y que no benefician al común de la sociedad. Ojalá la historia reciente y no tan reciente, nos haga reflexionar y aunemos esfuerzos en resolver los problemas sistémicos que cargamos hace mucho tiempo en lugar de tomar atajos que benefician a muy pocos en detrimento de la inmensa mayoría de la población. Siempre estaremos y estamos dispuestos a participar, aportar, debatir en pos de una industria más desarrollada, más inclusiva, más competitiva. Estamos convencidos que somos parte de la solución y no olvidemos nunca que los países desarrollados son ante todo potencias industriales. Ese es nuestro norte.
Conferencia ProTextil 2023
Fundación ProTejer se encuentra en plena fase de diseño de su conferencia anual ProTextil 2023, que se realizará el 9 de noviembre en la ciudad de Pilar al norte de Buenos Aires.
Este año la Fundación ProTejer celebra 20 años por lo que de acuerdo con Galfione la edición 19 de ProTextil tendrá un condimento especial.
Para la fecha de publicación de esta edición de TP, Fundación ProTejer seguramente habrá empezado la convocatoria para la conferencia que siempre es un éxito, ya que se trata del principal encuentro anual de toda la cadena de valor textil y de la confección en Argentina.
Estén muy pendientes del sitio web (fundacionprotejer.com) y las redes sociales de Fundación ProTejer, donde se compartirá la agenda y los principales temas que este año se abordarán en la conferencia
Septiembre-Octubre de 2023